Coaching
Alcanzar las metas que nos hemos propuesto es un arte en el que intervienen muchos factores.
Y la mirada externa de un coach ayuda a ordenar estos factores y aporta una estructura al proceso de lograrlos. No podemos resolver un problema en el mismo nivel de conciencia en el que se ha creado. Por lo tanto, es necesario salir de nuestro marco de referencia habitual para encontrar nuevas opciones que nos permitan nuevas acciones que nos conduzcan al resultado deseado. Y para ello, necesitamos a alguien que nos acompañe para explorar ese terreno desconocido. En definitiva, el coaching es un proceso y el coach es la persona que te acompaña a través de él.
¿Cuándo es necesario un proceso de coaching?
- Cuando se quiere alcanzar una mejora del desempeño o el rendimiento (alcanzar nuevas metas personales o profesionales)
- Cuando se quieren desarrollar habilidades o competencias específicas (potenciar el liderazgo, hablar en público, mejorar la gestión emocional, las habilidades relacionales, etc...)
- Cuando se quiere resolver un conflicto con otra persona o dentro de un equipo (y necesitas herramientas para gestionarlo)
- Cuando hay que tomar decisiones (y no sabes qué decisión tomar)
- Cuando hay que afrontar algún cambio (un nuevo cargo con más responsabilidad, cambio de trabajo, reorientación profesional, etc...)
No podemos resolver un problema en el mismo nivel de conciencia en el que se ha creado
¿Cómo funciona?
Individual
Para profesionales y autónomos
Un proceso de coaching individual se estructura en sesiones de una hora de duración. La frecuencia de las sesiones y la duración del proceso son variables y se pactan al inicio del mismo con el propio profesional.
Para empresas y organizaciones
Para directivos
El proceso de coaching es individual para un directivo. La diferencia con el coaching para profesionales es qué en este caso, las sesiones son más largas y las condiciones del proceso se pactan con la empresa.
Para equipos
El proceso se hace sobre el equipo como una entidad, no individualmente. Se trabajan los objetivos de equipo y las dinámicas internas que se establecen entre sus miembros. Las sesiones pueden durar entre 2 y 4 horas. Las condiciones del proceso se pactan con la empresa.